jueves, 19 de septiembre de 2019

THURSDAY, 19th SEPTEMBER

GOOD MORNING!!!!

Amanece en New Jersey y después de un abundante desayuno para coger fuerzas, nos montamos en el autobús con destino a Nueva York.

La primera será en Central Park, el parque más grande de la ciudad con una extensión de 341 Hectáreas. Es un oasis para aves migratorias y contiene varios lagos artificiales, dos pistas de patinaje sobre hielo, zonas de hierba para actividades deportivas, un zoo...









Salimos de Central Park hacia Fifth Avenue y empezamos a caminar por esta interminable calle, llena de tiendas impresionantes, restaurantes, oficinas y edificios que parecen tocar el cielo.

La Quinta Avenida (en inglés Fifth Avenue) es una de las principales arterias del centro de Manhattan, en la ciudad de Nueva York. Repleta de apartamentos de lujo y de mansiones históricas, la Quinta Avenida es un símbolo de la bonanza económica de Nueva York. La sección de la avenida entre la calle 34 y la calle 59, es también una de las zonas de compras más exclusivas del mundo junto a Oxford Street en Londres, Campos Elíseos en París, la Vía Montenapoleone en Milán.

Ha sido catalogada de forma continua como una de las calles más caras del mundo con precios de alquiler similares a los de París, Londres y Tokio: la denominación de "la calle más cara del mundo" varía año a año debido a las fluctuaciones de las divisas y las condiciones económicas locales. Durante varios años desde mediados de los 90 el distrito de compras entre las calles 49 y 57 ha sido catalogado como el segundo precio más caro por metro cuadrado de superficie de venta por detrás de la calle londinense Sloane Street.



Hacemos una primera parada en "Trump Tower", que es propiedad del actual presidente de los Estados Unidos y alberga el ático que Donald Trump utiliza como residencia privada. 



Continuamos nuestro camino hacia el sur de la Quinta Avenida y nos encontramos con la Catedral de San Patricio. Es de estilo neogótico y parece humilde en comparación con el cercano Rockefeller Center, que la supera considerablemente en altura. Fue restaurada entre 1927 y 1931 y fue ahí cuando se instaló el gran órgano que se esconde en su interior.




Cruzamos la Quinta Avenida para contemplar la figura en bronce de Atlas sosteniendo el universo. Atlas es el nombre, en la mitología griega, del gigante que sostiene la Tierra y el firmamento sobre sus hombros. Hijo de Jápeto y Clímene, Atlas es un titán que fue condenado a cargar con el planeta por Zeus. La escultura fue instalada en 1937 y realizada por el escultor Lee Lawrie con la ayuda de Rene Paul Chambellan.



A continuación nos adentramos en Rockefeller Center. Es un complejo de 19 edificios comerciales, siendo el "General Electric" el más importante, el cual se construyó en 1930 y tiene una altura de 266 metros. Aquí es donde se instala la famosa pista de patinaje sobre hielo y el gran árbol de Navidad que tantas veces habréis visto en las películas.





No se puede acabar mejor este viaje que con una foto de Rafa Nadal, ejemplo de superación, trabajo, esfuerzo y constancia.


Cuesta despedirse y no terminar diciendo ¡hasta mañana!. Ha sido un verdadero placer compartir esta experiencia con estos chicos, ver sus caras de felicidad y admiración ante todo lo que les rodeaba y les quiero dar la enhorabuena porque su comportamiento ha sido ejemplar en todo momento. Me he sentido muy orgullosa de ellos. 

¡MUCHAS GRACIAS, FAMILIA, POR HABERLO HECHO POSIBLE!

¡UN BESAZO MUY FUERTE!


WEDNESDAY, 18th SEPTEMBER

GOOD MORNING!!!

Habíamos quedado todos los alumnos del intercambio a las 7:30 en el hall de la entrada principal para despedirnos y, como os podéis imaginar, la estampa era desoladora. Abrazos que no querían terminar, lágrimas que se desbordaban de los ojos, frases de esas que nunca se quieren decir... un momento triste para los chicos (y los no tan chicos) aunque con un cierto toque de alegría ya que sabemos que a esta historia todavía le queda, al menos, una segunda parte.






Nos encontramos en Battery Park, que es un parque situado al sur de la isla, con el que sería nuestro guía durante nuestra estancia en la ciudad. Desde allí salimos en ferry hacia la Isla de la Libertad, donde nos esperaba la famosa Estatua de la Libertad. Todos la conocemos, así que sólo diremos que fue un regalo que los franceses hicieron a los estadounidenses para conmemorar el centenario de la Declaración  de la Independencia y como símbolo de hermanamiento entre los dos países.

La antorcha original de la Estatua de la Libertad, reemplazada hace 33 años por su deterioro, destella en el nuevo museo de 2.400 metros cuadrados a los pies de la dama de hierro, en Nueva York.

El nuevo museo recoge entre sus paredes de diseño, curvadas al estilo de la caída del vestido de la efigie, los modelos originales y algunas de las réplicas utilizadas al construir "La libertad iluminando al mundo", su nombre real, así como explicaciones sobre el proceso de construcción y algunos de los nombres propios que explican la existencia del reconocible símbolo neoyorquino.







Tras la visita volvíamos a coger el ferry rumbo a Ellis Island. Allí se encuentra el museo de inmigración, un lugar que da claridad a la historia de este país desde finales del siglo XIX.

El Museo de la Inmigración de Ellis Island es un histórico centro de inmigración en funcionamiento desde 1892 hasta 1954. Actualmente es un monumento nacional y un museo con más de 30 galerías dedicadas a la inmigración. Sus exposiciones reflejan los tortuosos viajes de meses de duración, a menudo en embarcaciones atestadas de gente, luego de los cuales los inmigrantes, considerados “indeseables”, eran interceptados y separados de sus familias en la Sala de Registros.




Nos adentramos en Nueva York para contemplar y admirar la inmensidad de sus rascacielos y sus concurridas calles.




Continuamos nuestro paseo en dirección al lugar donde se encontraban las Torres Gemelas. El Memorial del 11-S es un monumento situado en la Zona Cero que homenajea a todas las personas que perdieron la vida en los ataques terroristas en 2001. Es un oasis de tranquilidad localizado en el corazón de New York que pretende recordar el pasado y llenar de esperanza el futuro.

Ocupa la mitad de la zona World Trade Center conformando un sorprendente espacio contemplativo, en pleno centro de la "locura" de Manhattan. Sobre el lugar que ocupaban las Torres Gemelas se encuentran asentadas dos enormes fuentes sobre las que desembocan llamativas cascadas artificiales. en los paneles laterales de las fuentes se pueden ver los nombres de los fallecidos en el trágico acontecimiento.




El Memorial cuenta con 400 robles que le aportan un carácter vivo y siempre cambiante. Entre los árboles destaca "El Árbol Superviviente", un árbol que sobrevivió a la catástrofe y se ha conservado en la zona como símbolo de la supervivencia y el renacimiento.







Junto al Memorial nos encontramos con una de las estaciones de metro más polémicas e impresionantes de New York, conocida como "Oculus". Esta obra, que parece un esqueleto o una paloma blanca, es del arquitecto español Santiago Calatrava. Debajo de esta bonita estructura blanca se esconde una importante estación de transporte público, con hasta 11 líneas distintas de metro y el tren que conecta New York con New Jersey. Además alberga un nuevo centro comercial con tiendas y restaurantes.



Más tarde cogimos el autobús para dirigirnos al restaurante "Bubba Gump" que está inspirado en la conocida película "Forrest Gump". Se sitúa en Times Square, una intersección entre la Avenida Broadway y la Séptima Avenida. Recibió su nombre actual por las oficinas de "The New York Times", que se encontraban en el edificio "One Times Square". Se ha convertido en un icono mundial y símbolo de esta ciudad que se caracteriza por su animación y por la publicidad luminosa.





Todos nos quedamos impresionados cuando salimos del restaurante por la noche y contemplamos las luces que envuelven este lugar. Es asombroso ver la cantidad de pantallas luminosas colocadas en las fachadas de los edificios, no existen palabras para definirlo, sólo imágenes.








Terminaba por hoy nuestra visita a New York, cogíamos el autobús con destino al hotel en New Jersey, donde descansaríamos y cogeríamos fuerzas para el día siguiente.

Ha sido uno de los días de los más espectaculares de la vida de nuestros chicos y muchos de ellos han dicho que "uno de sus sueños se ha hecho realidad".

¡Ha sido un placer!

SEE YOU TOMORROW!